En el mercado de divisas, el euro alcanzó su nivel más alto frente al dólar desde agosto, registrando un aumento del 0.13% y ubicándose en 1.1024 dólares. El índice dólar descendió un 0.2% en comparación con una cesta de seis divisas principales.
La libra esterlina experimentó un incremento del 0.4%, situándose en 1.2743 dólares. Este movimiento se produjo a pesar de los datos gubernamentales que indicaron una contracción del 0.1% en la economía británica durante el tercer trimestre, con estimaciones de falta de crecimiento en el segundo trimestre.
El yen japonés, que ha tenido un rendimiento inferior frente al dólar a lo largo del año debido a la política del Banco de Japón de mantener tasas de interés bajas, se mantuvo sin cambios, cotizando a 142.05 unidades por dólar.
Las preocupaciones sobre la seguridad del transporte marítimo en el mar Rojo generaron nerviosismo. Los precios del petróleo se recuperaron parcialmente tras las pérdidas del día anterior, provocadas por la decisión de Angola de abandonar la OPEP, lo que ha generado dudas sobre la unidad del grupo de productores en sus esfuerzos por limitar la oferta mundial. Los futuros del crudo Brent aumentaron un 0.8%, alcanzando los 80 dólares por barril.
El oro está en camino de cerrar la semana y el año con ganancias, acumulando un aumento del 12% en el transcurso del año y alcanzando los 2,049 dólares la onza.
